Comida de entrega de botillos de la Quinta Ciberbotillada

Ayer, tan solo hace unas horas, tenía lugar la primera reunión oficial de lectores de este blog, Plumilla berciano, con una buena excusa, la entrega de los botillos de la Quinta Ciberbotillada.

A la cita, además de gran parte de los agraciados y sus acompañantes, se sumaron otros participantes de la iniciativa y varios lectores, superando la cifra total de 30 asistentes. En total, 6 de los 10 premiados, que vinieron desde distintos puntos de España, recogieron su flamante botillo. Aunque los otros 4 restantes, que no pudieron acudir al acto, recibirán su obsequio por mensajería,   de la misma forma como se han enviado los premios en ediciones anteriores.

El evento comenzó alrededor de las 14 horas en el restaurante La Moncloa de San Lázaro, de Cacabelos, donde llegaron personas provenientes fundamentalmente de Madrid, Aranda de Duero (Burgos) y diferentes puntos de Galicia, arropadas por unos cuantos bercianos.  El menú de la comida estuvo compuesto por unos entrantes de queso de cabra de Veigadarte, cortesía de esta empresa, acompañados por diversos tipos de mermelada de La Moncloa. El plato fuerte fue una señora botillada, realizada con botillos del Bierzo -con los que nos agasajó el Consejo Regulador de la I.G.P Botillo del Bierzo, que también se hizo cargo, como cada año, de los botillos objeto del concurso y su correspondiente envío-, todo ello regado con el vino joven del Bierzo De 2, elaborado por Ada Prada Amigo, de La Moncloa. La comida terminó con un delicioso postre a base de crema de limón con castañas y helado de yogur con crema de orujo, que el personal de La Moncloa nos sirvió muy amablemente, como el resto de la comida, plagada de detalles, que nos ofrecieron de forma totalmente desinteresada. Lo cierto es que es muy de agradecer el trato que nos dieron, pues pasamos una estupenda tarde en un ambiente muy entrañable y con buenos amigos.

Desde aquí, agradecemos todo su esfuerzo a los colaboradores, así como a todos los asistentes, especialmente a los que se han desplazado muchos kilómetros. Eso sí, sin la compañía y el calor del resto de los bercianos, no hubiese sido lo mismo.

¡Muchas gracias a todos y esperemos repetir la comida el próximo año!

Saludos.